¿Cultura sin recursos?
Hola, ¿qué tal está? Con su permiso, hoy voy a hablar de cultura y para empezar traigo buenas noticias… Han comenzado las aulas y talleres de música que organiza el ayuntamiento… Hasta aquí lo bueno porque fui a la presentación y tengo que confesarles que a punto estuve de borrar a mi hija, porque el acto se limitó a un lamento, creo que justificado, del responsable del asunto sobre las carencias y precariedades de las aulas… Que si falta material, que si un teclado para 7 niños, que si así no se puede trabajar, etcétera, etcétera… No les canso… Más de lo mismo: voluntarismo, buenas intenciones, pobreza de medios y algunos que se colocan medallas.
En Ayamonte nos enorgullecemos de la actividad cultural del pueblo y tenemos razón… Hay pintores, músicos, poetas, historiadores, gente inquieta y creativa, mucha cantidad si la comparamos con el escaso compromiso de las instituciones… Si creen que exagero comparen la agenda cultural de este pueblo con cualquier otro en el que el volumen de artistas, y tomen esta palabra en su acepción más general, es mucho menor, de esta orilla y de la otra…
Puede que usted esté pensando que como estamos en crisis es lógico que nos apretemos el cinturón y si 7 niños tienen que compartir un pequeño teclado, ya bastante baqueteado, pues que se aguanten hasta que vengan tiempos mejores… Pero el caso es que ya hemos tenido tiempos mejores y la historia no fue diferente… En los no muy lejanos años en los que aquí se ataban los perros con longaniza las aulas de música y los talleres culturales tenían las mismas necesidades… ¡Más de 15 años ya llevamos con lo mismo! Así lo contaba, y me consta que es verdad, el maestro responsable…
Por tanto, la queja, aún en tiempos de vacas flacas, es justificada… Pero es que, además, se trata de niños y aquí, permítame, el asunto se torna de lo más serio y preocupante… Porque, a pesar de la voluntariedad y de los buenos maestros, es bien difícil aprender a tocar un instrumento si no lo tenemos, y entonces el aburrimiento aparece y los niños, mucho menos pacientes que nosotros, desertan y después va a ser bien difícil volver a rescatarlos… ¡Cuántos músicos y artistas en potencia perderemos por el camino!…
A pesar de las palabras y las promesas ya sabemos que la cultura, la educación y la investigación son las hermanitas pobres de los presupuestos, y cuando se trata de recortar, pues son las primeras que lo sufren… ¡Ya estamos hartos de declaraciones rimbombantes de políticos y responsables diciendo aquello de que solo nos haremos un país rico y competitivo si invertimos en educación! Lo han hecho Zapatero y el presidente de la Junta a quienes les ha faltado tiempo para justificar el recorte presupuestario en estas materias después de sus anteriores discursos en los que prometían que estas materias serían las lanzas de su proyecto político… Los investigadores, sobre todo los jóvenes, empiezan a hacer las maletas, otra fuga de cerebros… Ya habrá tiempo para lamentarlo…
¡Queremos hechos, queremos instrumentos, queremos recursos y queremos esfuerzo! Dejen señores políticos los discursos huecos y cumplan sus promesas, también con la cultura, con la educación y con nuestros hijos…
En Ayamonte nos enorgullecemos de la actividad cultural del pueblo y tenemos razón… Hay pintores, músicos, poetas, historiadores, gente inquieta y creativa, mucha cantidad si la comparamos con el escaso compromiso de las instituciones… Si creen que exagero comparen la agenda cultural de este pueblo con cualquier otro en el que el volumen de artistas, y tomen esta palabra en su acepción más general, es mucho menor, de esta orilla y de la otra…
Puede que usted esté pensando que como estamos en crisis es lógico que nos apretemos el cinturón y si 7 niños tienen que compartir un pequeño teclado, ya bastante baqueteado, pues que se aguanten hasta que vengan tiempos mejores… Pero el caso es que ya hemos tenido tiempos mejores y la historia no fue diferente… En los no muy lejanos años en los que aquí se ataban los perros con longaniza las aulas de música y los talleres culturales tenían las mismas necesidades… ¡Más de 15 años ya llevamos con lo mismo! Así lo contaba, y me consta que es verdad, el maestro responsable…
Por tanto, la queja, aún en tiempos de vacas flacas, es justificada… Pero es que, además, se trata de niños y aquí, permítame, el asunto se torna de lo más serio y preocupante… Porque, a pesar de la voluntariedad y de los buenos maestros, es bien difícil aprender a tocar un instrumento si no lo tenemos, y entonces el aburrimiento aparece y los niños, mucho menos pacientes que nosotros, desertan y después va a ser bien difícil volver a rescatarlos… ¡Cuántos músicos y artistas en potencia perderemos por el camino!…
A pesar de las palabras y las promesas ya sabemos que la cultura, la educación y la investigación son las hermanitas pobres de los presupuestos, y cuando se trata de recortar, pues son las primeras que lo sufren… ¡Ya estamos hartos de declaraciones rimbombantes de políticos y responsables diciendo aquello de que solo nos haremos un país rico y competitivo si invertimos en educación! Lo han hecho Zapatero y el presidente de la Junta a quienes les ha faltado tiempo para justificar el recorte presupuestario en estas materias después de sus anteriores discursos en los que prometían que estas materias serían las lanzas de su proyecto político… Los investigadores, sobre todo los jóvenes, empiezan a hacer las maletas, otra fuga de cerebros… Ya habrá tiempo para lamentarlo…
¡Queremos hechos, queremos instrumentos, queremos recursos y queremos esfuerzo! Dejen señores políticos los discursos huecos y cumplan sus promesas, también con la cultura, con la educación y con nuestros hijos…
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