martes

LOS SOCIALISTAS NO TOMAN CAFE

Inauguremos este 2011 con una reflexión que alguno puede interpretar como de escasa profundidad política,… y tendrá razón, lo que no es obstáculo para que lo siguiente sea un indicio importante del porqué de los resultados de las encuestas que vaticinan un vuelco importante en las próximas elecciones…
Bien ahí va… Dediquemos unos minutos a pensar en la relación entre los socialistas y el café…
Busquemos los precedentes… Seguro que recordará cuando en aquel Tengo una pregunta para usted Zapatero dijo que un café valía 80 céntimos… Aquel desliz, prueba irrefutable de lo alejado de la realidad que anda este hombre, le costó una de las frases que permanecerán durante largo tiempo entre las grandes sentencias televisivas de finales del siglo XX… Eso sería en los tiempos del abuelo Pachi, le replicaron… Y en verdad que se lo merecía…
Ahora ha sido uno de sus ministros, Miguel Sebastián… Sí, aquel que entre sus grandes logros está el atreverse a ir sin corbata al Parlamento… Bueno, el que ha dicho que la brutal subida del recibo de la luz es poco menos que un café… Y, lógico, le han llovido los palos desde todos los lados… No solo por el mal ejemplo, sino por el desprecio implícito que sus palabras llevan contra una bebida que ha formado parte de la cultura y la forma de vida occidental desde el descubrimiento de América…
¿Por qué ese encono socialista contra un fruto que mantiene al mundo en pie y despierto?
He aquí, como decía, una de las pistas que puede explicar el estado del socialismo español… Adormilado, noqueado, falto de reflejos y espeso…
Y es que además de un asesor económico que ponga al día al presidente y a sus ministros sobre los precios reales de las cosas y las economías domésticas, este gobierno necesita un bidón de café bien cargado…

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