Como en los últimos días hemos estado entretenidos con la ruptura del pacto de gobierno quizás no hayamos atendido al cúmulo de desgracias que se le han acumulado al equipo de gobierno socialista:
- Condena de la Unión Europea por la destrucción del endemismo vegetal Picris Wilkommin en las obras de La Rodadera.
- Quiebra de la empresa Bégart con la consiguiente paralización de las obras del Palacio de Congresos, el mausoleo socialista.
- Estado terminal del Ayamonte CF que concentra a sus socios y directivos frente al Ayuntamiento para reclamarle el pago de la deuda y su responsabilidad ante la posible desaparición de uno de los clubs de fútbol más antiguos de la provincia.
- Desaparición del Festival del Poniente, el único espacio institucional para la música y la cultura juveniles.
Quizás la crisis económica o la situación heredada podrían ser excusas para explicar una situación que raya el desgobierno, pero la crisis es general y no parece afectarle tan agudamente a los municipios vecinos muchos más ágiles y ocurrentes en buscar soluciones. En cuanto a la segunda cuestión, hay que recordar que el actual alcalde basó su estrategia electoral en repetir que su gestión sería continuista… No quieres caldo…
No, posiblemente haya más de una razón de la desastrosa situación actual… Una es, sin duda, el bajísimo perfil político de la mayoría del equipo de gobierno, fichajes variados y “alternativos” sin formación política la mayoría. Otra podría ser, el gafe de un político que creció a la sombra de un populista con mucho mejor suerte que el.
Mientras el alcalde intenta capear el temporal, algunos de sus compañeros dan la impresión de que la historia no va con ellos, y como la frivolidad no es amiga de los malos tiempos, el desánimo y el cabreo crecen en una población con enormes potencialidades humanas y materiales para construir una ciudad moderna y fuerte.
Hoy este pueblo necesita un equipo de gobierno fuerte, decidido y con ideas, y el PSOE local quizás un brujo que le espante la mala follá…
- Condena de la Unión Europea por la destrucción del endemismo vegetal Picris Wilkommin en las obras de La Rodadera.
- Quiebra de la empresa Bégart con la consiguiente paralización de las obras del Palacio de Congresos, el mausoleo socialista.
- Estado terminal del Ayamonte CF que concentra a sus socios y directivos frente al Ayuntamiento para reclamarle el pago de la deuda y su responsabilidad ante la posible desaparición de uno de los clubs de fútbol más antiguos de la provincia.
- Desaparición del Festival del Poniente, el único espacio institucional para la música y la cultura juveniles.
Quizás la crisis económica o la situación heredada podrían ser excusas para explicar una situación que raya el desgobierno, pero la crisis es general y no parece afectarle tan agudamente a los municipios vecinos muchos más ágiles y ocurrentes en buscar soluciones. En cuanto a la segunda cuestión, hay que recordar que el actual alcalde basó su estrategia electoral en repetir que su gestión sería continuista… No quieres caldo…
No, posiblemente haya más de una razón de la desastrosa situación actual… Una es, sin duda, el bajísimo perfil político de la mayoría del equipo de gobierno, fichajes variados y “alternativos” sin formación política la mayoría. Otra podría ser, el gafe de un político que creció a la sombra de un populista con mucho mejor suerte que el.
Mientras el alcalde intenta capear el temporal, algunos de sus compañeros dan la impresión de que la historia no va con ellos, y como la frivolidad no es amiga de los malos tiempos, el desánimo y el cabreo crecen en una población con enormes potencialidades humanas y materiales para construir una ciudad moderna y fuerte.
Hoy este pueblo necesita un equipo de gobierno fuerte, decidido y con ideas, y el PSOE local quizás un brujo que le espante la mala follá…
1 comentario:
Y la pregunta es: ¿aguantará Antoñito Castillo hasta el final de la legislatura o dará la "espantá" como los malos toreros?
Saludos!!
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